Enfrenta el Colegio nuevos retos
Rumbo a su 50 aniversario, el Colegio de Ciencias y Humanidades reflexiona sobre las acciones que enfrenta ante las nuevas condiciones y desafíos generados por la pandemia y el consecuente confinamiento.
Docentes de los cinco planteles del CCH y cuatro áreas del conocimiento; profesores de distintas dependencias relacionadas con la educación media superior y funcionarios e investigadores, llevaron a cabo el Coloquio El Modelo Educativo del Colegio ante los nuevos desafíos.
El encuentro académico tuvo como propósito identificar las tareas y retos del tránsito de la enseñanza presencial a la enseñanza en línea e híbrida como nuevo escenario académico, y conocer iniciativas y experiencias acerca de cómo mejorar las prácticas educativas que fortalezcan el Modelo Educativo del Colegio, en el contexto de la pandemia y para la época postpandemia.
Las actividades de la actividad docente tuvieron lugar del 24 al 26 de noviembre, de manera virtual, por medio de YouTube, y estuvieron conformadas por seis mesas de trabajo, donde se presentaron 30 ponencias de profesores, especialistas e investigadores con amplia experiencia en los temas.
Enfrentar los desafíos
“El Coloquio es oportuno ante los desafíos causados por la pandemia que ha puesto a prueba los sistemas educativos a nivel mundial, nacional y en el ámbito del bachillerato universitario”, señaló Benjamín Barajas Sánchez, Director General del CCH, al inauguran los trabajos, el 24 de noviembre.
“Lo anterior, por sí mismo, es motivo suficiente para reflexionar sobre los retos que supone la migración de la enseñanza presencial al espacio virtual, considerando además el papel que juegan las nuevas tecnologías y los reacomodos de los actores naturales del proceso de enseñanza aprendizaje”, enfatizó.
Por otra parte, en el Colegio también hay una amplia experiencia de investigación, análisis y evaluación de propuestas educativas sobre las tareas de docencia y aprendizaje en el marco de su Modelo Educativo, que es una construcción colectiva que se ha adecuado a las circunstancias de su historia, ya que nació de una idea que ha necesitado del trabajo de los profesores, alumnos, trabajadores y funcionarios para su realización en las aulas y laboratorios.
“Por ello, muchas cosas habrá que repensar para actualizar el Modelo Educativo, sin perder su esencia, como por ejemplo, la identidad de los jóvenes y profesores en estos tiempos posmodernos; los procesos de enseñanza-aprendizaje frente al auge de las nuevas tecnologías; las certezas o ambigüedades que pudiera estar generando la ciencia posmoderna; la cultura básica y el perfil del egresado; la concepción filosófica del hombre y la mujer en el siglo XXI y los principios o formulaciones pedagógicas, entre otras cuestiones, relevantes”, concluyó.